Ciudad de México, México.– La diputada Karina Sánchez Ruíz (NA) secretaria de la Comisión de Asuntos Indígenas, se pronunció por impulsar la promoción de programas de detección de cáncer de mama en los pueblos indígenas, con respeto a su cosmovisión y en apego a sus dialectos.
Propuso que las autoridades federales realicen jornadas de detección de cáncer de mamá y orientación médica, y que estos servicios se ofrezcan en las 20 lenguas indígenas de las etnias con mayor población.
Indicó que las mujeres indígenas presentan el doble de posibilidades de morir por enfermedades prevenibles respecto de las que no son hablantes de dialectos indígenas, de acuerdo a un informe conjunto de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS).
También dijo que, de acuerdo con el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Coneval), los integrantes de los pueblos indígenas enfrentan obstáculos para tener acceso a la educación, “factor que limita sus capacidades y herramientas para desarrollarse plenamente en sociedad, en particular para acceder a servicios de salud”.
Sánchez Ruíz aseveró que las barreras culturales y lingüísticas son trabas a los cuales se enfrenta este grupo.
Por esa razón, “se deben realizar labores de detección bajo una perspectiva de sensibilización intercultural, que tenga como fin la detección oportuna de cáncer, el cual, según la Secretaria de Salud (Ssa), es la principal causa de muerte en la población femenina del país”.
Consideró prioritario que las Unidades Médicas Móviles se acerquen a los pueblos originarios que están en zonas remotas del territorio, y albergan a seis millones 146 mil 479 mujeres, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La diputada por Oaxaca recordó que el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) precisó que las mujeres indígenas constituyen uno de los sectores de la población con mayor rezago en materia de salud, debido a una triple discriminación: por condición étnica, de género y de clase.
Agregó que, para evitar dicho padecimiento, “aparte de la detección temprana de signos anormales que involucran el autocuidado, resulta necesario seguir acercando información eficaz de prevención de la metástasis, como es el realizar una actividad física diaria, de 30 minutos a una hora, y alimentar a los recién nacidos vía lactancia materna”.
