Ciudad de México, México.— Al celebrarse uno más del Día Internacional del Trabajo, cientos de miles de obreros mexicanos, oficiales e “independientes”, salieron a las calles capitalinas para exigir mejores salarios y creación de empleos con salarios dignos.
El gobierno capitalino reportó saldo blanco durante las marchas y movilizaciones con el derecho a libre manifestación que se efectuaron en la capital del país al celebrarse el Día del Trabajo en orden y paz.
Para conmemorar el 1 de mayo de 1886, cuando trabajadores de Chicago, Estados Unidos, salieron a las calles a defender sus derechos laborales y a exigir jornadas de trabajo y salarios más justos, el gobierno capitalino dispuso de un despliegue de elementos de Seguridad Pública a fin de resguardar la integridad de los alrededor de 100 mil trabajadores de diversas organizaciones sociales, No Gubernamentales, sindicatos e integrantes de la sociedad civil que participaron en diversas marchas.
Entre otros, se movilizaron integrantes del Congreso del Trabajo y sindicatos independientes para pedir, principalmente, aumento salarial y mejoras de los trabajadores en sus derechos laborales.
Desde las primeras horas, los contingentes se concentraron en el Zócalo capitalino y en diversos puntos como en el Ángel de la Independencia, el Hemiciclo a Juárez, el Monumento a la Revolución, la Plaza de la República, en las calles 20 de Noviembre, Pino Suárez, en Paseo de la Reforma esquina con Eje 1 Norte, así como en Tacuba y Eje Central. La mayoría marchó hacia la Plaza de la Constitución y otros llegaron ahí directamente.
La administración capitalina, a través de la Secretaría de Gobierno, coordinó diversas acciones enfocadas a preservar el bienestar personal y patrimonial de la población, para que las concentraciones se llevaran a cabo en orden y paz.
De esta manera se garantizó el derecho a la libertad de expresión consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, en la Constitución Mexicana y en la Constitución de la Ciudad de México.
