Por lo anterior, exigió conocer la totalidad de los recursos recaudados durante este año, a efecto de hacer una proyección realista para el 2017 y evitar una distribución inequitativa del presupuesto.
Al participar en la mesa de trabajo de comisiones unidas de Hacienda y de Presupuesto y Cuenta Pública con la Subsecretaria de Egresos del Gobierno la Ciudad de México, Victoria Rodríguez Ceja, el diputado Paulo César Martínez criticó queno se gaste todo lo recaudado. Explicó que la subestimación de ingresos frena la generación de empleos y de servicios en la Ciudad de México.
Argumentó que durante la actual administración se han generado tres superávits fiscales: uno de 7 mil 388, en 2013; otro de 13 mil millones, en 2014; y más de 12 mil millones de pesos en 2015.
Cuestiono el aumento al Tribunal Electoral del Distrito Federal, al concederle 15.4% más en un año no electoral, mientras que a las delegaciones sólo se les dará un aumento de 6%. Esto afectará de manera directa programas sociales primordiales, como la pensión alimentaria para los adultos mayores que con lo proyectado no alcanza la universalidad y deja fuera a cientos de personas de la tercera edad.
Martínez López enlistó otros organismos que resultarán afectados, entre ellos el Sistema de Transporte Colectivo Metro, el Instituto de Vivienda del Distrito Federal y el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, a los que se otorgan incrementos de apenas 3.9, 3.3 y 2.4 respectivamente.
Enfatizó que para el grupo parlamentario de MORENA es de suma importancia el tema ambiental, por lo que le preocupa que sólo se destine 4.8% del presupuesto al desarrollo económico sustentable, dejando fuera temas como el cuidado del suelo de conservación, cambio climático, calidad del aire y agua, entre otros.
Lamentó que en el proyecto de presupuesto 2017 sólo se incluya al bosque de Chapultepec y se deje en el olvido al de San Juan de Aragón, importante área de valor ambiental para la ciudad.
Por último, hizo hincapié en que temas como la Línea 9 del Metro y el rescate de los mercados públicos no pueden seguir esperando, ya que están al borde del colapso.
