Niega SCJN amparo a SME

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Por unanimidad de votos, los ministros dieron la razón al gobierno federal, que alegó la constitucionalidad del decreto por el que decidió la extinción de la paraestatal y, por tanto, la conclusión de las relaciones laborales con el sindicato y sus agremiados. y determinó que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no puede ser patrón sustituto de los ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LyFC).

El proyecto del ministro Luis María Aguilar establece que el tribunal colegiado interpretó de manera incorrecta la naturaleza de la relación laboral entre el presidente de la República y los trabajadores de los organismos públicos descentralizados, como lo era LyFC.

Aguilar sostuvo que, de acuerdo con diferentes precedentes de la propia Corte, el patrón de los afiliados al SME no era el Ejecutivo federal, sino LyFC, pues era un organismo descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios y, por tanto, establecía directamente las relaciones con sus trabajadores y era responsable de las mismas ante ellos.

La sala coincidió en que el titular del Ejecutivo Federal no es el patrón único de toda la administración pública federal, incluidos los organismos descentralizados, y no era necesario entrar al análisis de si la CFE debía ser el patrón sustituto de los ex trabajadores, porque ésta no participó en el contrato.

El Sindicato Mexicano de Electricistas interpondrá una queja ante el Consejo de la Judicatura Federal y otra más ante la Corte Internacional de Derechos Humanos por la actuación que tuvo la Corte al aceptar el recurso de revisión del amparo que ya les había otorgado un tribunal para que pudieran ser reinstalados.

Los abogados del gremio y la dirigencia, encabezada por Martín Esparza, señalaron que esto no es una derrota para los trabajadores, sino que sólo alargará más el conflicto que ahora se irá a instancias internacionales y que además llevará a que se escale la protesta.

A las afueras de la Corte, en un mitin multitudinario que llevaron a cabo los esmeítas, Esparza tuvo que llamar a los trabajadores a la calma, ya que “estaban muy encabronados”; del mismo modo los conminó a resolver esto por la vía política y legal, aunque auguró que el gobierno está llevando a los trabajadores a un conflicto social, apoyado por los “ministros corruptos de la Corte”.