Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Con 111 votos a favor, 3 en contra y 5 abstenciones el Senado de la República aprobó la renuncia de Eduardo Medina Mora a la Suprema Corte.
Bueno, hasta los panistas reacios a dejarlo pasar sin explicar sus razones graves, al final se allanaron y votaron a favor de su graciosa e inesperada huida.
Luego de que más de 20 senadores ocuparon la tribuna en demanda de una explicación de Medina Mora, Monreal habló y destrabó la aprobación de la renuncia al pedirles considerar que el Senado no es la instancia que pueda juzgar al ex ministro y que él creía que todos deberían respetar el principio de presunción de inocencia, y del debido proceso de cualquier acusado.
Donde las cosas simplemente no se le dan a Ricardo Monreal por más que cede y cede ante la oposición, es en lo de la revocación de mandato y la consulta popular.
Por eso ayer sólo se dio la primera lectura del dictamen y se espera que, pasado mañana, jueves, ya logre obtener la mayoría calificada para sacar adelante dos temas del mayor interés de su jefe político, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En el primero, tabasqueño propuso poder poner a consideración de los mexicanos su permanencia en la Presidencia de la República el domingo 4 de julio de 2021 junto a la elección federal para renovar los 500 diputados federales, 16 gubernaturas y cientos de alcaldías y diputaciones locales.
Pero a pesar de que la Cámara de Diputados ya lo aceptó, en el Senado la oposición amenaza con impedir que se pruebe.
En busca de vencer las resistencias, el líder de la mayoría de los senadores de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política ha modificado radicalmente el proyecto original.
Finalmente Monreal y su grupo aceptan que la consulta ciudadana sobre la revocación de mandato sea organizada por el INE, que se realice en un día ajeno al 4 de julio de 2021, y que no se efectúe por solicitud del Presidente de la República.
Junto con la revocación de mandato va la aprobación de la consulta popular.
El mayor escollo son los 24 senadores del PAN y su alianza con los 15 del PRI, 9 de MC y 3 del PRD. Si mantienen su bloque, no habrá aprobación porque suman 51 de los 128 senadores. Y para aprobar lo que quiere, Monreal necesita 86 votos y los suyos apenas representan 76 votos.
POR SI LAS DUDAS
Desde la sede nacional del PAN, Marko Cortés advirtió que sus senadores no aprobarán la revocación de mandato porque los diversos dirigentes y analistas del blanquiazul creen que es una trampa de AMLO para perpetuarse en el poder.
“En el mundo solamente tres países tienen la figura de la revocación de mandato. Uno es Bolivia, otro Venezuela, donde han usado esta figura para perpetuarse en el poder precisamente; y el otro es Ecuador, en donde no ha sido usada la figura”, subrayó.
Menos aún caerán, dijo Cortés, cuando López Obrador un día dice una cosa y al otro lo contrario. Recordó que se aprobó la Guardia Nacional porque se supone tendría mando civil y en los hechos hoy es militar.
“Y por eso es que no aprobamos la revocación de mandato, porque lo que busca el Presidente es perpetuarse en el poder”, insistió.
LA BUENA Y LA FEA
Y mientras esto ocurría en el pleno, en la Comisión de la Belisario Domínguez el Senado aprobaba conceder la Medalla del prócer a Doña Rosario Ibarra de Piedra, a la que calificaron de: “una incansable luchadora por los desaparecidos”. Con ello quedan fuera por el momento de este reconocimiento la escritora Elena Poniatowska y la economista Ifigenia Martínez.
Esta era la buena noticia porque la fea ocurrió en el pleno de San Lázaro donde la diputada panista Adriana Dávila, acusó al diputado petista Gerardo Fernández Noroña no sólo de haberla insultado sino amenazado.
Resulta que el petista se apareció el viernes 4 pasado en el Congreso de Tlaxcala donde declaró:
“Me comentan que hay una diputada, que fue senadora, y que está vinculada a este tema (la trata de personas) y que es más bocona que la chingada, no sé si sea cierto o no, pero en Tlaxcala siguen los problemas… pásenme elementos para ponerle una chinga la próxima vez que abra la boca”.
Confrontado, Fernández Noroña intentó eludir la denuncia diciendo que él no había dicho el nombre de nadie. Pero resulta que el perfil señalado cae sólo en el de la diputada Adriana Dávila.
El petista vio venir el tsunami porque todas las diputadas comenzaron a unirse para actuar su contra y varios de los compañeros de bancada de Dávila hablaban de “darle una madriza” porque ya son muchas las que hace Fernández Noroña.
Entonces buscó a la ofendida, se disculpó y acudió con ella a una rueda de prensa donde hizo público su arrepentimiento de haber dicho lo que dijo.
A ver si la siguiente no se la juntan a esta.
Y FELIPE CANCELA LA CONFERENCIA
Quien finalmente reculó ayer fue el expresidente Felipe Calderón quien estaba programado diera una conferencia hoy en el TEC de Monterrey sobre economía.
Por redes sociales ya andaban como en 23 mil las firmas en contra de su asistencia a ese campus, donde en su mandato militares mataron a un par de estudiantes y luego intentaron acusarlos de narcos sembrándoles armas y droga.
Calderón tomó como pretexto para su cancelación el rechazo de la señora Rosa Elvia Mercado, madre de Jorge Antonio, uno de los ejecutados.
“Su parecer, en mi opinión, es razón más que suficiente para que suspenda mi visita al Tec.
“Considero que es de la mayor importancia atender esta opinión de la señora Mercado, y en todo caso poder reunirme con los familiares de Jorge y Javier, para poder dialogar con ellos, escucharlos de viva voz y precisar también alguna de la información que se ha divulgado”, subrayó.
NO HABRÁ DESAPARICIÓN DE PODERES
Y para cerrar, como lo habían adelantado ya Monreal y el michoacano Cristóbal Arias, ayer, en medio de todo el revuelo legislativo, la Comisión de Gobernación del Senado declaró legalmente improcedentes las peticiones de desaparición de poderes en los estados de Veracruz, Tamaulipas y Guanajuato.
Hay que señalar que esa comisión es plural y tiene representación de todas las fuerzas parlamentarias por lo que se consideró que ese falló fue lo que en diplomacia se conoce como “quid pro quo” y en mi barrio “algo por algo”.
Así nadie actuará contra el gobernador veracruzano de Morena Cuitláhuac García, como lo ansiaba el panista Julen Rementería del Puerto (neta que así se llama y no, no es personaje de novela vasca o argentina), ni contra los mandatarios panistas Francisco García de Tamaulipas, o Diego Sinhue, de Guanajuato.
Por hoy la pelea entre morenos y panistas queda tablas.
