Ha trascendido en medios y cuartos de guerra que durante el año 2012, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, filtró a la revista #Proceso una investigación a fondo sobre las extravagantes finanzas del Gobierno del Estado de México; el jefe de esa Unidad venía de estar tres años al frente de la delegación conjunta de PGR-SHyCP en Washington D.C.
Que por esa investigación, salió a flote un préstamo puente de miles de millones de pesos, con los cuales el Gobierno del Estado de México saldó el gigantesco adeudo público que puso a esa entidad federativa en quiebra técnica; se trataba de una peligrosa deuda sub-soberana, sin anuencia del Congreso de la Unión, cuyos acreedores extranjeros podían apoderarse del territorio mexiquense.
Que la extravagancia resultaba más notoria cuando se reveló que se trataba de un préstamo casi personal al gobernador Enrique Peña, pagadero en varias semanas, otorgado por el hispano Banco Santander, teniendo como ejecutiva de cuenta a Guadalupe Caso viuda de Videgaray, conocida como La Kiki Namé, cuyo hijo era en ese momento el secretario de finanzas del Gobierno del Estado de México, cuasi quebrado financieramente.
Que una vez saldada la enorme deuda sub-soberana, pronto la administración mexiquense cubrió el mega-millonario préstamo puente, pero nunca fue investigada la peculiar forma del pago al banco español, ni se investigó la entrada al Estado de México de empresas trasnacionales, vinculadas al patrimonio personal del Rey de España.
Que el SAT, la PGR y la Unidad de Inteligencia Financiera de SHyCP también nada hicieron en contra de Enrique Peña ni de #LuisVidegaray.
¿Sabe usted querida lectora, quién estuvo al frente de la SHyCP durante 2012?
Que era José Antonio Meade Kuribreña, el mismo que ahora es otra vez Secretario de Hacienda y Crédito Público, en sustitución de Luis Videgaray Caso, defenestrado por el presidente Enrique Peña Nieto.
Que la anterior información es trascendente porque entre 2018 y 2024 no habrán prescrito los presuntos delitos federales en que incurrieron los protagonistas de esas extravagantes finanzas, siendo irónico que el gobernador Javier Duarte esté en picota por ese tipo de operaciones en Veracruz.
