Aconseja Miranda Nava, a su compadre y presidente, Peña Nieto dejar de oír los argumentos de Beltrones por la derrota electoral

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Veracruz
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Ha trascendido en medios y cuartos obscuros de psiquiatras, que atrás de Enrique Peña Nieto en los últimos nueve días, estuvo su compadre e íntimo asesor áulico Luis Enrique Miranda Nava, quien le aconsejó dejar de oír los argumentos de Manlio Fabio Beltrones Rivera, sobre las derrotas electorales.

Que la estratagema mirandista, para que el Presidente no autorizase a Beltrones manifestarse, consistiría en dejar que feneciese el plazo legal para la presentación de esas impugnaciones ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, conforme a la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación en Materia Electoral.
Que al reconocer Peña tácitamente las derrotas electorales e imputárselas a Beltrones como chivo expiatorio, el mexiquense se quitó un lastre y anuló a un alto costo al fuerte aspirante presidencial, eludiendo Enrique su culpa por esos fracasos en los sufragios y soslayando o tratando de ignorar su propio naufragio.

Que el modus operandi del huésped principal de Los Pinos, ya se había aplicado en Guerrero, cuándo Enrique Peña Nieto financió la cruenta, rata e idiota gubernatura perredista de Ángel A Rivera contra su primo priísta Manuel Añorve, éste apoyado por Manlio Fabio Beltrones. 
Que el más afortunado de ese esquizofrénico modus operandi, es el góber Xavier Duarte D’Ochoa, quien ya habría redactado su pliego de mortaja, pues, juró ante sus socios e íntimos Fidel Herrera Beltrán, Enrique Jackson Ramírez, José Nelson Murat Cassab, Emilio Gamboa Patrón y Burrén Figuermex Exchómpiras, lo siguiente:
Que antes de las doce de la noche, en la víspera de la fecha en que el gobernador electo deba asumir constitucionalmente el cargo, éste será aprehendido por orden de un juez a petición del Fiscal General de Veracruz.
Que aún saliendo libre bajo fianza, 72 horas después, ya no sería jurídicamente posible que ostentara la gobernatura, pues, al no haber tomado posesión ante el Congreso del Estado en la fecha legal, éste habría designado al gobernador interino en razón de que el electo no se presentó en día previsto en la Constitución Política de Veracruz La Llave.