Se busca que ésta acción intersecretarial garantice su acceso a los mercados, y para lo cual se deberá restituir la suficiencia económica a la empresa paraestatal Liconsa.
En el un punto de acuerdo, considerado de urgente resolución, el Pleno también exhortó a los titulares del Poder Ejecutivo, de las entidades federativas y al jefe de Gobierno de la Ciudad de México, a que atendiendo a las necesidades de leche que requieran sus respectivos programas sociales, ésta sea comprada directamente a Liconsa, que a su vez pueda adquirir los excedentes en el mercado nacional.
Al presentar la propuesta, el diputado Oswaldo Guillermo Cházaro Montalvo (PRI), presidente de la Comisión de Ganadería, resaltó que esta actividad hoy vive una de las mayores crisis de su historia. La volatilidad de los mercados internacionales, la sobreproducción mundial y la caída de los precios de la leche en polvo, así como las prácticas comerciales especulativas, hacen que siendo un país todavía deficitario se tengan aparentes excedentes que se dejan de comercializar, estimados en alrededor de 315 mil litros diarios.
Refirió que hay acuerdos productores-gobierno para ejercer un programa de fortalecimiento de la cadena productiva. Un elemento importante de ello, es el Programa de compras de leche fluida de Liconsa, que a través de los años ha incrementado su volumen hasta alcanzar 870 millones de litros en el 2015, adquiridos principalmente a pequeños y medianos productores, mediante un presupuesto de 2 mil 183 millones de pesos, aunque de la producción nacional significa solo el 7.25 por ciento.
Esta compra, añadió, establece una muy importante referencia de precios y políticas de recepción que mucho ayudan a estos pequeños ganaderos, por lo que al disminuir el presupuesto para el 2016 en 542 millones de pesos, se reduce su capacidad de compra.
El diputado Ángel García Yáñez (Nueva Alianza) subrayó que actualmente los productores de leche de Jalisco, Chihuahua, Veracruz, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Puebla y Morelos, han visto afectada su producción por una sobreoferta de productos importados y una competencia inequitativa en el mercado internacional, lo que ha dificultado comercializar la leche fluida a nivel nacional.
Refirió que las compras que realiza Liconsa son fundamentales para este sector, ya que del total de leche producida en el 2015, adquirió 868 millones de litros, un 7.25 por ciento de la leche fluida a nivel nacional. En algunas regiones, adquiere alrededor del 30 por ciento de producción, por lo que es fundamental en el comportamiento de los precios de referencia para la compra de producto lácteo en el país.
En su turno, el diputado Salvador Zamora (Movimiento Ciudadano) acompañó la tragedia de los pequeños productores pecuarios, y en particular la difícil situación que atraviesan los productores lecheros de nuestro país.
Sin embargo, estimó que no se puede decir a la autoridad que otorgue un mayor apoyo a la industria ganadera, cuando “somos omisos al señalar que las políticas agropecuarias implementadas por esta administración solo benefician los intereses de las grandes compañías nacionales y extranjeras”. Su grupo parlamentario se abstendría de votar el punto de acuerdo.
De Morena, el diputado Rogerio Castro Vázquez mencionó que Liconsa, en 2015, presupuestó 2 mil 183 millones de pesos, para adquirir 700 millones de litros bajo el Programa de Adquisición de Leche Nacional. Para este ejercicio fiscal 2016, se tiene presupuestado 1 mil 141 millones de pesos, con la finalidad de adquirir 770 millones.
Es decir, agregó, con 541 millones menos respecto al año anterior, Liconsa comprará 70 millones de litros más, abaratando los costos de producción y no protege al productor. Se pronunció a favor del punto de acuerdo y que se evite importar leche y sus derivados.
La diputada Evelyng Soraya Flores Carranza (PVEM) comentó que en 2015, en México se estimó una producción de 11 millones 600 mil toneladas de leche, de las cuales sólo se consumieron 4 mil 185, quedando un excedente de 7 mil 415 miles de toneladas, que corresponden al 64 por ciento de la producción nacional de leche fluida que no tiene destino. Es decir, existe un déficit de colocación y comercialización del producto.
La cantidad y calidad de producción de leche nacional permitió a México colocarse como el noveno productor mundial y, a pesar de ello, los índices de importación de leche procesada resaltan por el impacto que ha tenido en el mercado interno, dado que se trata de un producto que cubre, entre otros rubros, el abasto social de la leche de Liconsa, por lo que se pronunció por sumar esfuerzos entre las distintas instituciones.
Del PRD, el diputado Elio Bocanegra Ruíz dijo que de acuerdo con datos oficiales, México ocupa el tercer lugar en la producción de lácteos en América Latina con más de 11 mil millones de litros de leche al año y un hato de cerca de 2.3 millones de cabezas de ganado. Sin embargo, posee el primer sitio mundial en adquisición del producto en polvo.
El problema que se enfrenta es complejo. Los precios de la leche fluida se deprimen por exceso de la oferta del producto y se tiene un importante déficit de producción nacional que, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía y de Sagarpa, lleva a importar anualmente más de 215 mil toneladas de leche en polvo. Estimó que se requieren decisiones equilibradas para que sin afectar a la población de menos ingresos, se atienda el problema crítico de mercado que enfrentan los productores de lácteos.
El diputado del PAN, Gerardo Federico Salas Díaz, consideró que el problema de los productores de leche es impostergable, ya que la crisis en la cadena productiva motivada principalmente por una sobreproducción lechera a nivel internacional, competencia desleal de productos no lácteos que realizan las grandes empresas, y la insuficiencia presupuestal de Liconsa para este año, golpea alrededor de 250 mil productores en todo el país.
Exigió al gobierno federal la implementación urgente de un plan que permita a los productores lecheros mayor certidumbre en la venta de su producción, planear adecuadamente sus volúmenes de crecimiento, involucrar programas de sanidad y mejoramiento genético, así como de apoyo para infraestructura y equipo. Asimismo, que Liconsa favorezca la compra a productores nacionales transparentando el padrón de proveedores en tiempo real.
El diputado Ramón Villagómez Guerrero (PRI) consideró que el presupuesto para Liconsa durante este año no debió reducirse, al contrario, incrementarse de acuerdo a la inflación anual, como se ha hecho en otros rubros.
Enfatizó que cada peso que se le retire a Liconsa, es un daño directo a los que menos tienen, y miles de familias que cuentan como único sostén económico la producción de leche, se encuentran hoy ante la incertidumbre y falta de garantías de que su producto tendrá acceso en el mercado. Se pronunció a favor del punto de acuerdo.
