“MADRAZO” DE LA TREMENDA CORTE A LAS “PINCHIS PALABRAS MALDITAS” Y A SUS ESCRIBANOS

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Insultar es un Arte: Dales la Vuelta/Cógelas del Rabo (chillen Putas)/Azótalas/Dales azúcar en la boca a las rejegas/Ínflalas, Globos, Pínchalas/Sórbeles Sangre y Tuétanos/Sécalas/Cápalas/Písalas, Gallo Galante/Tuérceles el Gaznate, Cocinero/Desplúmalas/Destrípalas, Toro/Buey, Arrástralas/Hazlas, Poeta/Haz que se traguen sus Palabras (las Palabras). Sí Octavio Paz, autor de este poema, el Nobel de Literatura saliera de su tumba y escuchara el dictamen de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de que palabras como “maricón” y “puñal no están protegidas por la Constitución y su uso puede ocasionar que cualquier persona pueda ser demandada por daño moral al usarlas, regresaría a la tumba.

Y es que la SCJN en lugar de trabajar y resolver asuntos que vulneran la vida cotidiana de los mexicanos (su sentencia sobre la francesa Cassez abrió una enorme puerta a la Impunidad de Secuestradores y Torturadores por el llamado “Debido Proceso”), tocó fibras sensibles del diario hablar de los mexicanos. Volviendo a Paz, autor de un texto fundamental para entender lo anterior, ”El Laberinto de la Soledad”, sostiene que en nuestro lenguaje diario hay un grupo de Palabras Prohibidas, Secretas, sin contenido claro, y a cuya mágica ambigüedad confiamos la expresión de las más brutales y sutiles de nuestras emociones y reacciones. “Palabras Malditas que solo pronunciamos en voz alta cuando no somos dueños de nosotros mismos…Palabras que no dicen nada y dicen todo. Los adolescentes cuando quieren presumir de hombres las pronuncian con voz ronca. Las repiten las Señoras, ya para dignificar su libertad de pensamiento, ya para mostrar la verdad de sus sentimientos. Son las malas palabras, único lenguaje vivo en un mundo de vocablos anémicos. ¡La Poesía al alcance de todos¡”

Un breve repaso del Diccionario de Malas Palabras y Modismos —incluyendo vulgaridades— recogidas entre los ciudadanos  de a pie en su diaria comunicación, muestran hasta qué punto, este código verbal triple XXX forma parte de nuestra cultura de las relaciones sociales. Por ejemplo tenemos: “Poca Madre, Bien Verga, Hijo de Puta, Hijo de Tú Reputísima Madre, Cabrón, Caraeculo, Culero, Comemierda, Me Cago en Tú Madre, Guevón, Maricón, Tarado…”

En “Los Hijos de la Chingada”, Octavio Paz define con precisión la filosofía del mexicano: la posibilidad de Chingar o ser Chingado, es decir de Humillar, Castigar y Ofender. De ahí la riqueza de significados de sus derivadas como: ”Hacer una Chingadera, Chingaquedito, Chingonazo, Chingadazo, Me lleva la Chingada, Chingoncito, No la Chingues, Un Chingo, Ya Chingué, Estoy en Chinga, Una Chingaderita…”La Chingada a fuerza de usos, de significados, acaba por gastarse, agotar sus contenidos, convertirse en una palabra hueca, pero ofensiva.

LA CORTE FRENTE AL ARTE DE INJURIAR

Un Peladito expresa así la conquista de México: ”Hace un Chingo de años, los Indios eramos bien Chingones, Cuauhtémoc era el Gran Chingón. Pero llegarón un Chingo de Gachupines y los muy Hijos de la Chingada hicieron mil Chingaderas y Changaron a los Indios. Y nos cargó a todos la Chingada.”

Ya lo dijo el gran Jorge Luis Borges(1899-1986) en su  clásico ensayo “El Arte de Injuriar”, donde no únicamente ponderó la injuria como un género literario, sino que también expuso el método, la techné de sus creadores: ”Prodigar las exageraciones burlescas, las falsas caridades, las concesiones traicioneras…”

Borges también se declaraba admirador del Alma Gemela de la Injuria, la Sátira: “una vindicación elegante de esas miserias puede invocar la tenebrosa raíz de la sátira. Ésta se derivó de las maldiciones mágicas de la ira, no del razonamiento…Su método es la intromisión de sofismas, su única ley, la simultánea invención de buenas travesuras.”

La Sátira es válida también para las mejores formas del agravio, la injuria y el insulto. Así, el que se atreve a la grosería, a los “tacos españoles”, leperadas mexicanas, ”cobras y lagartos” brasileños, en realidad mancha el entorno más que herir en específico. El practicante o profesional de esta Cirugía (una amplia Gama de Periodistas de todos los Medios) debe lograr lo que el usurero Shylock de Shakespeare no pudo: arrancar la carne de su víctima (hacer escarnio o sarcasmo, que ambas palabras se relacionan con la carne), sin derramar una gota de sangre. El Insulto verdadero, que no es calumnia ni difamación, no ofende sino define y por lo tanto sepulta impunemente, porque no admite réplica, aun cuando genere rencores eternos.

Como el Arte de Injuriar se relaciona con la eficacia del lenguaje, las palabras más comunes con las que se injuria y difama comienzan con i y con P. Tenemos primero: Idiota, Ignaro, Ignorante, Imbécil, Iletrado, Imperialista, Inculto, Impúdico, Indeseable, Indigno, Inepto, Infeliz, Infiltrado, Inmundo, Insecto, Insignificante, Intelectualoide, Intransigente, Intolerante, Inútil, Iscariote, etc.

También: Padrote, Puto, Pagano, Pájaro, Palero, Papanatas, Papamoscas, Parásito, Paria, Patán, Patético, Patriotero, Payaso, Payo, Pécora, Pederasta, Pedorro, Pelado, Pelafustán, Pelagatos, Pelele, Pelmazo, Pendejo, Perdedor, Perro, Pigmeo, Piojo, Pirujo, Plebe, Ponzoñoso, Pueblerino, Puerco, Puñetero, Puto, etc.

La SCJN ordenó a un tribunal colegiado que analice de nueva cuenta una demanda entre dos periodistas de Puebla que data de 2010, quienes utilizaron las expresiones “maricón” y “puñal” en notas y artículos periodísticos para criticar su labor profesional, sin embargo resolvió proteger a las minorías de expresiones homofóbicas, colocándose en una posición incómoda y  peligrosa para la libertad de expresión y para el grueso de la sociedad civil mexicana que utiliza dicho lenguaje para comunicarse todos los días.

“Está cabrón” si los Ministros Jorge Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero y Arturo Zaldívar Lelo de Larrea creen que con su dictamen pueden cortar de tajo una de las costumbres lingüísticas del mexicano—“retorcer las pinchis palabras”— que viene desde la época de la Colonia. Todo lo contrario, ”están en Chinga guey, en busca de la Gallina de los Huevos de Oro, guey, para salir de esta Chingada Crisis, guey…órale guey…Mocos gueyes…”

OBRADOR CONTRA LA TV-NOVELA DE PEÑA NIETO

Andrés Manuel López Obrador convocó a una gran jornada de información en todas las plazas del país para desarticular “el plan de TV-Novela nacional del gobierno de Enrique Peña Nieto”, que consiste en la posible privatización petrolera y del aumento del impuesto al valor agregado(IVA).
Ante simpatizantes en Mazatlán, Sinaloa, apuntó que lo que vive el país no es un estado de derecho ni de aplicación de la ley, sino una TV-Novela llamada “Frívolos y corruptos”, cuyo actor principal es Enrique Peña Nieto y será por episodios.

Acaba de pasar el “capítulo de gran impacto, que fue la traición de Peña Nieto a su amiga y socia Elba Esther”, porque la detención de la ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, “fue un ajuste de cuentas”. El próximo capítulo, agregó, será “Lágrimas de cocodrilo”, porque Peña Nieto va a los funerales del presidente venezolano Hugo Chávez.

Advirtió que vienen capítulos más fuertes que serán en relación con hambrear al pueblo, con el aumento de los impuestos, y así “es una tv-novela nacional y es circo”.

En efecto, no anda tan perdido el Peje en su caracterización de la realidad telenovelesca que vivimos: Marcelo Ebrard y Mancera se confrontan; Obrador se desmarca de Hugo Chávez; La detención de Elba Esther Gordillo aumentó la popularidad del presidente Enrique Peña Nieto, al subir seis puntos en nueve días, informó el presidente de Consulta Mitofsky, Roy Campos; Peña Nieto aprovechó el vacío dejado por la Izquierda y viaja a Venezuela; El Delegado de Iztapalapa sufre una agresión de vecinos de dicha demarcación, debilitando un liderazgo estratégico de la izquierda perredista en la ciudad de México; y la UCM refleja la disputa a muerte por la Rectoría de dicha institución que mantienen las tribus Obradoristas contra las Marcelistas.

La realidad de TV-Novela construida por Peña Nieto a 100 días de su Gobierno, baja el telón de sus primeros capítulos con una revelación (que parece de telenovela) poco difundida que muestra la fragilidad del movimiento progresista: la muerte de Hugo Chávez dejó huérfana a una parte de la izquierda mexicana y a los tres exdiputados federales (Gerardo Fernández Noroña, Balfre Vargas Cortés y Rosendo Marín Díaz) que le  expresaron su decepción y distanciamiento de López Obrador solicitándole ayuda por medio de una carta. Así, el Cristo Bolivariano le deja su legado al Peje.

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